La minería ilegal continúa agraviando a los pobladores de los alrededores del cerro El Toro, en la provincia de Sánchez Carrión. Además, estas acciones contaminan el medio ambiente, a pesar de que el Perú está suscrito en el Tratado de Minamanta. Este tratado determina que se debe acatar la fiscalización del uso de mercurio en la extracción minera. Asimismo, refiere a controlar su comercialización.
Recientemente, se han captado imágenes de camiones arrojando relaves mineros y abriendo trochas ocultas para trasladar el material. Los pobladores se han quejado muchas veces pero, aseguran que no se les hace caso. “Hemos denunciado estos hechos, pero no hemos tenido espacio. Los mineros ilegales tienen poder, dinero y son alertados por algunos medios. Por eso exigimos presencia del Estado y de la Policía”, declaró un habitante de Coigobamba.
Según las personas que se ven afectadas y conocen del daño que causan estas sustancias, el mercurio que utilizan, causa efectos graves. El mercurio se transforma en metilmercurio y permanece en suelo, aire y agua, enfermando a las personas.
Los registros de la Sunat aseguran que ninguna empresa mediana o artesanal minera, está autorizada para utilizar mercurio. Sin embargo, los mineros en Huamachuco vienen usando esta sustancia para la extracción del ansiado oro.
Imagen: Diario El Correo