Arturo Fernández, exalcalde de Trujillo, recibió asilo político por parte de las autoridades argentinas y actualmente reside en Buenos Aires. El diario Clarín, uno de los más conocidos del país vecino, lo entrevistó.
Arturo Fernández Bazán, exalcalde de Trujillo no volverá al Perú por ahora. El excandidato presidencial solicitó asilo político en Argentina y hoy reside legalmente en San Fernando, Buenos Aires donde fijó domicilio tras recibir un documento provisorio de permanencia otorgado el 11 de noviembre por el Ministerio del Interior. La autorización, emitida el mismo día en que Diego Santilli asumió como ministro, tiene validez hasta el 9 de febrero de 2026, periodo durante el cual permanecerá bajo protección migratoria en el país vecino. Este estatus le permite vivir, desplazarse y mantenerse en Argentina mientras se evalúa su situación política y judicial en el Perú, donde mantiene una sentencia de prisión efectiva por difamación.

Clarín lo entrevista
La ubicación exacta del exalcalde ‘Loco de Moche’ no era conocida hasta que Noticias Trujillo reveló que no estaba en Ayacucho, como se había especulado, sino en Buenos Aires. La confirmación pública de su paradero permitió que Clarín, uno de los diarios más influyentes de Argentina, lo entrevistara, donde accedió a hablar sobre los motivos que lo llevaron a pedir asilo, su percepción del proceso en su contra y su situación actual.
El exburgomaestre de Trujillo le contó a Clarín su travesía hasta Argentina. Fernández indicó que primero pasó por Bolivia y que luego ingresó sin documentos a Argentina, donde pasó unos días en la provincia de Catamarca, donde residen sus tíos paternos desde hace más de 40 años. Luego pidió asilo político, el cual fue concedido por el ministro del Interior, Diego Santilli. Además, el excandidato presidencial se comparó con el mandatario de Argentina, Javier Milei, al indicar que ambos son conocidos como ‘Locos’.
No estaba en Ayacucho
Previo a ello, en el Perú surgieron múltiples versiones sobre su paradero. Se creía que se escondía en zonas rurales de Ayacucho o que había recibido apoyo de simpatizantes para evitar su captura. Sin embargo, la documentación argentina, su domicilio declarado y la entrevista publicada terminaron de desmentir todas esas hipótesis.
Hoy, Fernández enfrenta sus procesos desde el extranjero. Mientras su defensa sostiene que es víctima de persecución política, las autoridades peruanas mantienen las órdenes en su contra. Lo cierto es que, con su permiso migratorio vigente, el exalcalde permanecerá asilado en Argentina por lo menos hasta febrero, viviendo lejos del país en el que ejerció dos veces como autoridad municipal.






