En región La Libertad, la alta radiación UV en verano representa un riesgo para la salud de la piel, y según el Ministerio de Salud, más del 80% de los peruanos no usan protección solar adecuada. Para protegerla, la dermatóloga Carmen Prada y la nutricionista Menina Neyra de la Clínica San Pablo Trujillo ofrecen cinco consejos clave para mantener una piel saludable y protegida:
Protección solar, la prioridad
“La exposición al sol sin protección provoca manchas, envejecimiento prematuro e incluso cáncer de piel. Es esencial usar protector solar con un factor mayor a 50 y reaplicarlo cada tres horas”, advierte la Dra. Prada. Además, sugiere complementar con sombreros de ala ancha, gafas de sol y ropa de tejido tupido.
Hidratación desde adentro y afuera
Neyra destaca la importancia de beber al menos dos litros de agua diarios. “También es incluir clave alimentos como sandía, melón, pepinillo y lechuga, que hidratan y aportan antioxidantes”, explica. Por su parte, la Dra. Prada recomienda usar hidratantes ligeros como gel o serums para mantener la piel hidratada.
Nutrición para una piel radiante
“Los alimentos ricos en vitamina C, como cítricos y fresas, estimulan la producción de colágeno. Por su parte, los omega-3 presentes en pescados grasos como atún, sardinas y jurel ayudan a reducir la inflamación. Además, los frutos secos y las semillas aportan vitamina E, que protege la piel del daño celular”, explica la nutricionista.
Evitar los excesos
La dermatóloga aconseja limitar la exposición al sol entre las 10 am y las 4 pm, cuando los rayos UV son más intensos. También se recomienda exfoliar la piel suavemente una vez a la semana para eliminar células muertas y mejorar la hidratación.
El descanso favorece la reparación celular
“Dormir entre 7 y 8 horas diarias es clave para la regeneración de la piel”, destaca la Dra. Prada. El descanso adecuado ayuda a la piel a recuperarse de los daños provocados por el sol y otros factores ambientales.
Adoptar una rutina de protección, hidratación y descanso puede hacer una gran diferencia en cómo luce y se siente la piel durante el verano.