César Acuña seguirá en el cargo, ya sea hasta el final de su período o hasta que renuncie para postular nuevamente en las próximas elecciones presidenciales de 2026.
Después de cuatro meses, la revocatoria del gobernador regional de La Libertad, César Acuña Peralta, ha fracasado al no reunir las más de 350 mil firmas necesarias para proceder con su destitución.
El plazo para la recolección de firmas venció el pasado 11 de octubre, dejando inconclusa la iniciativa liderada por Wilfred Díaz, quien se mostró optimista en un principio, pero finalmente no logró su objetivo.
Un proceso fallido
Wilfred Díaz, principal impulsor de la revocatoria, había iniciado la campaña con la esperanza de destituir a Acuña por supuestos incumplimientos de obras y promesas durante su gestión.
Sin embargo, tras varios meses de movilizaciones y esfuerzos de recolección, no pudo alcanzar las firmas requeridas para llevar a cabo el proceso de revocatoria.
Confianza de Acuña desde el principio
César Acuña, líder del partido Alianza Para el Progreso (APP) y gobernador regional, desde el inicio del proceso se mostró confiado en que la revocatoria no prosperaría. Desde la entrega del kit electoral por parte de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) en junio, Acuña declaró que no estaba preocupado por la campaña en su contra.
«La revocatoria no me va a distraer. Quien decide es la población. No me preocupa en absoluto», señaló Acuña.
El estancamiento de las firmas
En julio, Díaz había logrado recolectar alrededor de 30 mil firmas, y en ese momento aseguraba que conseguiría las firmas necesarias a través de marchas y esfuerzos adicionales en las calles y en su local ubicado en el centro de Trujillo. Sin embargo, con el paso del tiempo, el número de firmas dejó de crecer al ritmo esperado, y la campaña quedó estancada.
Pese al entusiasmo inicial, la cifra de firmas necesarias no se alcanzó, poniendo fin a la posibilidad de revocar a Acuña. Las esperanzas de Díaz se desvanecieron junto con el apoyo popular necesario para completar el proceso.
Reacciones en APP
Desde APP, la reacción fue de alivio. El presidente del Consejo Regional de La Libertad, Ever Cadenillas, expresó que estaban seguros de que la revocatoria no prosperaría.
«No se ha concretado, y en su momento dijimos que no iba a proceder. Vacar a un gobernador es muy difícil, incluso más costoso que una campaña electoral. Habría que ver quién ha financiado este proceso. Así como se regula a candidatos, debería saberse quién brinda los recursos para una revocatoria», señaló Cadenillas.
El proceso de recolección de firmas inició el 28 de junio, cuando la ONPE entregó el kit de revocatoria a los impulsores de la campaña. Sin embargo, al llegar el 11 de octubre, no se había logrado reunir la cantidad necesaria de firmas, dejando el intento por destituir al gobernador regional en el olvido.
El alcalde de Trujillo también se salva
Un caso similar ocurrió con el alcalde de la Municipalidad Provincial de Trujillo, Mario Reyna Rodríguez, quien recientemente se afilió a APP. Los promotores de su revocatoria tampoco consiguieron las firmas suficientes para sacarlo del cargo.
Cabe señalar que, Reyna asumió la alcaldía de Trujillo tras la destitución de Arturo Fernández Bazán, quien fue retirado por una sentencia por el delito de difamación en agravio de una mujer policía, cuando era alcalde del distrito de Moche.
¡Atención!
El fallido intento de revocar a César Acuña y Mario Reyna refleja las dificultades de estos procesos, tanto por los requisitos legales como por la capacidad de movilizar a la población para reunir las firmas necesarias.
Mientras tanto, César Acuña continúa su mandato como gobernador regional, confiando en que su gestión se mantendrá hasta el 2026, aunque cabe la posibilidad que deje la región para popular a la presidencia de la Republica de Perú.