En operativos de serenazgo junto a la Policía Nacional del Perú, durante el toque de queda a nivel nacional, lograron intervenir una casa en La Esperanza, donde se venía realizando una fiesta de manera clandestina. En esta se encontró a cerca de 20 jóvenes bebiendo licor.
Asimismo, se les encontraron con el uso incorrecto de las mascarillas y cero distanciamiento.
Pese ser de conocimiento la tragedia ocurrida en Lima por una fiesta clandestina, las personas continúan realizando reuniones clandestinas. Los números de contagios continúan en aumento.