Mandataria señaló que durante su gestión será transparente pero al parecer no está cumpliendo con palabra.
En una nueva controversia que complica aún más su situación legal, la presidenta Dina Boluarte solicitó a la Corte Suprema que no se autorice el levantamiento de su secreto médico, en el marco de la investigación fiscal por presunto abandono de funciones debido a sus cirugías estéticas realizadas entre junio y julio de 2023.
La petición fue realizada durante la audiencia llevada a cabo el pasado viernes 4 de abril ante el juez supremo Juan Carlos Checkley, según reveló el programa Cuarto Poder. Esta negativa contrasta con las declaraciones públicas que la mandataria ofreció semanas atrás en un mensaje a la Nación, donde aseguró estar dispuesta a colaborar con la justicia y a entregar voluntariamente su historial clínico.
En aquella ocasión, Boluarte manifestó enfáticamente: «Cuando se dignen en citarme y el Ministerio Público haga su trabajo, renunciaré voluntariamente a mi derecho a la confidencialidad médica y entregaré mi historial clínico». Sin embargo, su reciente accionar ante el Poder Judicial contradice estas palabras, lo que ha generado críticas sobre su real disposición a transparentar los hechos.
El Ministerio Público investiga si la mandataria incurrió en abandono de cargo mientras se sometía a procedimientos estéticos, situación que, de ser confirmada, podría configurar un hecho de extrema gravedad institucional. El levantamiento del secreto médico es considerado clave por la Fiscalía para esclarecer si durante esos días Boluarte dejó efectivamente de ejercer sus funciones presidenciales sin autorización ni transferencia formal de mando.
Hasta el momento, el Ejecutivo no ha emitido una respuesta oficial sobre esta aparente contradicción entre el discurso y la acción de la jefa de Estado.
